¿Qué puerta elijo?

¿Qué puerta elijo?

La puerta ha cobrado protagonismo en los últimos años y se ha convertido en uno de los elementos de decoración más importantes, puesto que se trata de un mueble más. Cambiarlas es una inversión de futuro, por ello hemos de sentir que nuestra elección es la que más se adapta a nuestra forma de vida.

 

Elija unas puertas que desaten su imaginación y que le permitan conseguir una decoración de ensueño.

¿Clásico o moderno?

La elección de un modelo u otro puede determinar el estilo de la decoración de la casa: ¿clásico o moderno?

Los modelos Clásicos permanecen en el tiempo con formas que resumen la distinción del hogar al que abren paso y puede aportar mayor calidez.

Lo modelos actuales, Modernos o de diseño pueden ofrecer una imagen vanguardista y conjugan luminosidad y simplicidad.

¿Madera o lacada?

Las puertas de Madera aportan mayor calidez al hogar y gozan de robustez y elegancia.

Las puertas Lacadas crean un efecto de luminosidad y claridad.

¿Abatible o corredera?

Elegir una puerta abatible o corredera nos permitirá modificar la distribución de una vivienda.

Las puertas Abatibles son más habituales. Pueden ser de una o de dos hojas. La ventaja de este tipo de puerta es que son cómodas y cierran muy bien.

Las puertas Correderas están especialmente indicadas cuando se dispone de un espacio reducido, puesto que resuelve este problema con elegancia y simplicidad. Elimina barreras arquitectónicas, proporciona libertad y movilidad y evita los portazos.

Lo primero que se ha de tener claro es si se busca que la puerta se integre en el resto de la vivienda, o por el contrario aprovechar la multitud de posibilidades decorativas de la misma consiguiendo elementos de exclusividad.

El material de una puerta nos ayudará a crear un ambiente único y ofrecerá unas cualidades también distintas.

El sistema de apertura de una puerta es primordial, este puede condicionar el espacio disponible de la habitación. Considerar colocar una puerta corredera en una habitación pequeña, puede ser una buena idea para ganar espacio.

Si utilizas papeles decorativos en paredes o pinturas de colores, elige una puerta sencilla que no choque con la personalidad de la decoración.